por Fernando Pérez Montesinos

El mapa que aquí se presenta es un experimento y una obra en construcción. Busca mostrar la geografía económica y social del porfiriato. Tiene por regla no utilizar imágenes fijas —no por el momento, al menos—. Las pinturas, daguerrotipos, litografías y fotografías de la época son hasta cierto punto abundantes. Sin embargo, no terminan de captar (no de inmediato) el proceso concreto y vivo del trabajo en las minas, haciendas y fábricas de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Las imágenes en movimiento, en principio, quizá lo hagan de mejor manera o, en todo caso, de forma un poco más atractiva para un público acostumbrado a leer en una pantalla después de dar un click.

El propósito es ofrecer a un público no especializado —sobre todo jóvenes estudiantes, pero no sólo— un cuadro un poco más cercano del verdadero dinamismo y complejidad de un conjunto de actividades económicas que dio como resultado una transformación drástica y profunda del paisaje físico, laboral y social del país. Para decirlo de manera simple, el mapa busca mostrar de dónde provenían y cómo se hacían las cosas que luego los consumidores en México y en muchas otras partes del mundo terminarían dando por sentadas. Cosas como la ropa, la comida, los cigarros, las cervezas o el petróleo refinado. También busca otra cosa igual de importante: seguir la pista de los oficios, las rutinas y las relaciones sociales de quienes, en última instancia, hacían éstos y muchos otros productos posibles. Esto es, se trata de saber cómo era vida (no toda, pero una parte importante) de miles e incluso millones de personas en el país.

Cabe aquí una advertencia. Quienes exploren el mapa notarán que las filmaciones no corresponden con precisión al porfiriato. También notarán que casi siempre provienen de otras geografías en el mundo. Como se sabe, las filmaciones en México no empezaron sino hasta después de 1895 y por lo común buscaron captar los actos cívicos del régimen y no tanto el trabajo machacón de las minas, los campos y las fábricas. De ahí que el material sea escaso y, en todo caso, no esté fácilmente disponible al público. No así una serie de grabaciones elaboradas (sobre todo) por agencias británicas y estadounidenses ya en el siglo XX, grabaciones ahora abiertas al uso público y disponibles en línea —de ahí la idea de hacer éste mapa—. Pese a las diferencias geográficas y temporales, sorprende hasta qué punto los procesos productivos en distintos puntos del globo (de Australia a la India y de Alemania a Canadá) continuaron sin cambiar de modo radical desde finales del siglo XIX. También sorprende, aunque mucho menos y pese a ciertas variaciones, la continuidad de los regímenes laborales sin importar las distintas geografías. Los lectores y las lectoras juzgarán mejor, pero un resultado inesperado (aunque afortunado) de la elaboración del mapa fue precisamente poder ilustrar estas continuidades y similitudes —lo que finalmente nos recuerda una obviedad: que lo sucedido en México era parte de un proceso global.

Se trata, como dije, de una obra en progreso. El plan es sustituir algunas filmaciones por otras más adecuadas e incluir actividades económicas y regiones que por el momento no están en el mapa.  Todavía más, el objetivo es acompañar las filmaciones con enlaces y anotaciones en los que se sugieran bibliografías básicas, de forma que los materiales audiovisuales se puedan examinar a la par de lecturas que ayuden a analizarlos de manera más informada y crítica. El mapa también incluye un par de enlaces a fuentes primarias. En el futuro, cada región y actividad podrá acompañarse de una fuente escrita de la época. Algunas de estas sugerencias tal vez terminen en la elaboración de mapas separados (entre otras cosas, para no saturar la pantalla). Ya se verá en otras entregas. Por lo pronto, son bienvenidos sus comentarios y sugerencias para nuevos videos, lecturas complementarias y fuentes primarias. La única limitante es que deberán estar públicamente disponibles en línea para poder ser incluidas en éste u otros mapas.

El mapa también puede ser consultado en el siguiente enlace: Geografía Económica del Porfiriato.[1]

 

[1] Nota: Este mapa es exclusivamente para propósitos educativos y de divulgación. El mapa usado de base para el fondo puede consultarse en la Perry-Castañeda Library Map Collection.

 

1 comments on “Geografía económica del porfiriato

Deja un comentario