Divulgación Historiografía

El mito de los desmitificadores

por Pedro Salmerón Sanginés *

Hace algunos meses decidí emprender una campaña, en La Jornada, contra un grupo de escritores que falsifican nuestra historia con propósitos políticos o ideológicos, o simplemente para vender libros. (Uno de esos textos puede verse aquí.) Estos falsificadores, entre los que descollan Armando Fuentes Aguirre (Catón), Macario Schettino, José  Manuel Villalpando, Juan Miguel Zunzunegui y otros, se han lanzado a “desacralizar” la historia de México, vaciándola de contenido y tratando de construir una nueva versión en lugar de la anterior, como si todo el conocimiento histórico se redujese a los libros de texto… quizá porque algunos de estos “desmitificadores” no han leído otros libros.

Sin ningún respeto por el conocimiento histórico, sin distinguir entre el hecho y su interpretación, con un muy escaso manejo de fuentes y nula crítica de las mismas, han escrito pilas de libros y toneladas de artículos periodísticos y guiones de radio y televisión, construyendo esta otra historia, casi siempre con intereses políticos explícitos e inmediatos.

Además de esos intereses inmediatos, los falsificadores tienen en común una visión de un México derrotado, de un México increíblemente rico en recursos naturales (porque nunca han hecho un estudio comparado de geografía económica) y unos habitantes flojos, sin iniciativa; en suma, imaginan un mexicano entreguista, desidioso y lleno de traumas. Defienden una historia que sostiene los prejuicios machistas, racistas y clasistas de los sectores más excluyentes de la sociedad mexicana. Para nuestros falsificadores, “los indios son flojos”, los campesinos “no saben trabajar”, el populacho necesita una dirección enérgica y mano dura.

Representaciones y mitos.
Contra la invención.

Frente a estas propuestas, propongo que parte de la atención del Observatorio de Historia consista en el monitoreo de la presencia de esas visiones excluyentes de la historia en los aspectos que nos convocan: la enseñanza de la historia, sobre todo en el nivel básico, y las conmemoraciones cívicas.

3 comments on “El mito de los desmitificadores

  1. Angélica Rodríguez

    Luis González de Alba, psicólogo que también divulga ciencia, no sé como sea en este ámbito (porque en él lo he leído poco), pero en la historia -que también pretende divulgar- ¡dice cada barbaridad!… y de él retoman desafortunadamente también a veces otros autores.
    Tales versiones no son nuevas, las he encontrado también en autores más antiguos, sólo que ahora son difundidas de manera más masiva (y también bastante simple), por ello es que cada vez pupulan más entre nosotros como «secreto a voces» (y ya ni tan secreto).

    Si se quiere contrarrestar la influencia, resulta muy necesario difundir los hechos históricos mejor investigados, realismo y contexto (como hecho usted en sus columnas) fuera de interpretaciones ideológicas simplistas o maniqueas, que es lo que caracteriza a quienes pretenden utilizar la historia fuera de su utilidad intrínseca.

    Esto no estoy segura de si lo hacen a propósito, en el caso de algunos autores, o porque así se les ha educado en sus escuelas de origen y/o su visión es parcial, derivada del medio en el que viven y que conocen (me gustaría darles el beneficio de la duda, aunque resultara quizá, que pecara yo de ingenua).

    Por otro lado, no habría tanto problema si la sociedad supiera también cómo investigar y acercarse a la historia, pero así como existe el analfabetismo científico, también existe el histórico, lo que ocasiona que, por lo general, los lectores crean con facilidad en estas nuevas -e inexactas y tendenciosas- versiones sin cuestionarlas.

    Para evitar eso, sería útil también, además de difundir los hechos históricos correctos, difundir asimismo un poco de método y teoría, para que los lectores o escuchas sepan de lo que se trata la historia (su interpretación, tipos de fuentes, etcétera) y no sólo se crean lo que un autor dice porque lo ha publicado en un libro o dice que es la verdad.

    En lo personal, agradezco mucho a los historiadores que ya se están ocupando de ello (como vos), acercándonos una visión más completa de los hechos.

    Una vez mencioné en una de mis columnas, que a veces el desmitificar al héroe suele devenir en «odiar al héroe» y esto no debe suceder, no es el propósito, aunque por desgracia parece serlo en algunos autores, que en vez de hacer revisionismo y tomar en cuenta otras versiones, vuelven a hacer maniquea la historia, cambiando el panteón de héroes y villanos para ajustarlo a sus corrientes ideológicas (cuando de esto se quejan en relación a la «historia oficial»).

    La labor que nos queda entonces ahora es doble: desmitificar (o humanizar esa historia de bronce), pero no sólo los antiguos mitos, ¡sino también los neomitos que se han creado en esta «historia alternativa»! (que ahora se vende como verdad, provocando una especie de esquizofrenia histórica al tener las dos versiones plagadas de mitos y tan contrarias entre sí).

    Una clave es, como comentaba una vez el doctor Vicente Quirarte: ¿por qué si nosotros no somos perfectos, le exigimos a los héroes que lo sean? Para las nuevas versiones, debido a no ser perfectos, algunos de los antiguos héroes devienen en «villanos», pero al contrario, pueden sesgar los hechos para convertir a alguno de los antiguos «villanos» en héroes.

    No se trata de eso, porque la historia no es un cuento, sino una historia de humanos, que con sus acciones contribuyeron a construir, o no, según sea el caso (a veces ambas cosas) un país o ámbito del mismo. En fin, me he alargado mucho, pero os deseo a todos los miembros del Observatorio de la Historia mucho éxito y agradezco mucho su labor.

    Por amor a nuestra historia!! (a hacerle justicia)
    … y que nuestro pueblo tenga conciencia de quienes somos y hacia dónde vamos como mexicanos

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  2. Estos historiadores que están muy en boga en éste sexenio panista que casi llega a su fin se han dedicado a hacer historia de buenos y malos, su discurso no va más allá y lo peor del caso es que no lo fundamentan, como si ellos hubiesen sido los descubridores de las fuentes o la misma fuente. Comento lo anterior porque en alguna ocasión llegue a revisar un libro de José Manuel Villalpando y en ningún lugar traía notas de las referencias ni bibliografía, lo peor es que eran muchos libros no uno sólo los que se encontraban en esa situación..

    Pedro Salmerón he hecho un excelente seguimiento, pero no hay que dejarlo solo tenemos que poner de nuestra parte como historiadores responsables para que no se sigan cometiendo estas arbitrariedades que nos afectan a todos, ya que es gente que sólo comparte lo que le conviene, plagia las fuentes al no citarlas e influye en la opinión de la gente, en particular en que se deja llevar por su discurso.

    S

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  3. La realidad es que vivimos en un país de ignorantes (en su amplia mayoría) y si bien no estoy totalmente de acuerdo con los desmitificadores, tampoco con los q llenan de gloria una historia que de gloriosa, solo tiene a los que ostentaron y siguen ostentando el poder, los demás somos carne de cañón….. el mexicano es ignorante porq sus poderosos pseudolideres se encargan de que asi sea, vanaglorian la historia para seguir anchándose a costa de ella y de un pueblo que no ve mas alla de la puerta de su casa, un país con políticos que de políticos solo tienen lo mas negro de su propio ámbito, lucradores, asesinos (todos sin importar partido)…… el juicio correcto no es solo de la buena interpretación de la historia, sino a lo que esta nos ah llevado, y en lo personal creo q con un país basto en infraestructura (porque sería tonto decir que México no lo es) natural, no nos armamos un chile, porque, por agachones, dejados y por una cantidad impresionante de mexicanos con falta de educación y valores……….. tan malo el roto como el descocido, o en que nos sirve vanagloriarnos de una historia que por ams rica en contenido, no nos lleva sino a ser como el nativo reprimido? Al mexicano (ya como nación a partir de 1821) reprimido, y a la sociedad actual tan reprimida como lo fueron los antepasados????? La historia se escribe todos los días y no es muy distinta a la de hace 300 años…..

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